Solo 2 de cada 5 docentes tienen acceso a una computadora exclusiva para
trabajar en el hogar. La brecha digital en educación no solo la sufren los alumnos
sino también los docentes que quieren seguir educando pero no tienen la tecnología
necesaria. Además son escasos los recursos de formación con que cuentan los
maestros para el uso de las mismas en educación a distancia. En todo el país se
registraron casos en los que, ante la falta de computadoras y de conectividad, se
multiplicaron los esfuerzos de los docentes para garantizar la continuidad de la
enseñanza y reducir las desigualdades educativas que ya existían. En este contexto, se
amplió la utilización de las emisoras de radio y televisión comunitarias para poder
llegar con programas educativos, o se abrieron las bibliotecas para llevar los libros casa
por casa de los estudiantes, tratando siempre de mantener el vínculo con los alumnos.
- El 86% de las familias valora positivamente el trabajo de la escuela en el contexto
de aislamiento. La pandemia llegó y requirió un distanciamiento social, pero la pasión
y el compromiso docente logró que la escuela se metiera en los hogares de sus
alumnos para mantener el vínculo entre los docentes y los estudiantes y así generar
un vínculo mayor para poder compartir las tareas de enseñanza y aprendizaje. Unas
horas después de decretado el aislamiento, los docentes se organizaron en grupos,
generaron actividades educativas, establecieron contenidos prioritarios y se intentó
llegar a contactar a cada uno de los estudiantes. Algunos medios fueron WhatsApp,
e-mail, redes sociales, incluso tocar el timbre en cada casa. Esto permitió que las
familias vieran que el docente no tiene horarios, que siempre trata de estar cuando se
lo consulta y dar una respuesta, que el docente está a disposición de la comunidad no
solo en su rol formativo sino también solidario, distribuyendo viandas, organizando
una colecta o acompañando y asistiendo en casos de violencia familiar o de género.
Todos estos recursos y cualidades que tienen los docentes dieron lugar a que las
familias valoraran positivamente el trabajo en el contexto de pandemia. - 9 de cada 10 docentes destinan más tiempo preparando las actividades escolares
en el contexto actual que en situación de normalidad. Para poder desarrollar una
buena tarea docente las horas del día no alcanzan. Los docentes multiplicaron sus
horas para poder llevar adelante actividades escolares, encontrar y conocer a sus
alumnos, y establecer un canal de comunicación. Cuando planificamos actividades
escolares en la educación presencial, la tecnología con la cual contamos en nuestras
escuelas es para todos los alumnos, en determinado tiempo y en determinado lugar
(un proyector, la sala de tableros de dibujo o el aula de informática). Ante la situación
actual las familias no cuentan con estos recursos y, por lo tanto, lleva más tiempo
planificar actividades escolares para poder llegar a todos los estudiantes. Son mayores
los desafíos que enfrenta un docente y las alternativas que tiene que generar para
poder desarrollar actividades escolares en un clima que no es el adecuado, ya que casi
todas las familias en sus hogares tienen más preocupaciones diarias, porque no tienen
para comer, por problemas laborales y/o por problemas de salud